martes, 5 de junio de 2018

Tres grandes emociones y una desilusión en la tercera semana del Festival de Música




La Filarmónica de Málaga y Thomas Quasthoff ayudaron a quitar el mal sabor de boca que dejó la suspensión del concierto de la Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE

No pudo ser. Pese a que el patio central del Hospital de Santiago de Úbeda se había vestido el viernes de gala para recibir a la Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE, formación que regresaba a la ciudad para participar de nuevo en su Festival Internacional de Música y Danza 'Ciudad de Úbeda', un inoportuno chaparrón pasó por agua los planes previstos. También los existentes de grabar el concierto por Radio Clásica y 'Los conciertos de La 2' para su posterior emisión.

Junto a la mezzosoprano Gerhild Romberger y al Coro Infantil Elena Peinado, la Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE iba a interpretar la Sinfonía número 3 de Gustav Mahler conocida como 'El sueño de una mañana de verano'. Casi doscientos intérpretes estaban preparados para afrontar esta inmensa obra frente a un patio de butacas abarrotado cuando, tras la introducción del primer movimiento, comenzó a chispear, lo que obligó al director a interrumpir. Tanto los músicos como el público se refugiaron bajo el pórtico del patio en un momento en el que el agua ya caía en tromba, mientras los operarios se dedicaban a cubrir con plásticos parte del escenario y los instrumentos más grandes que no se podían retirar. También plegaron atriles y sillas a la vez que los técnicos retiraban o protegían micrófonos, focos, cámaras y demás equipo.

Hubo momentos de incertidumbre. Pero cuando la tormenta remitió minutos más tarde, se comprobó que era imposible reiniciar el concierto porque todo estaba demasiado mojado. Y aún era más complicado el tema de la grabación, algo en lo que se había estado trabajando durante varios días. Así, no hubo otra opción que la de recoger y desalojar el recinto. En los próximos días será comunicada la fórmula para la devolución del importe de las entradas. Aunque se intentará buscar otra fecha para el recital. Todo se anunciará oportunamente.

Reconocimiento

Antes de que la lluvia pasara por agua la velada musical, sí pudo entregarse el reconocimiento previsto. El director titular de la orquesta, Miguel Ángel Gómez-Martínez, recibió el Premio Nacional 'Amigos de la Música' que todos los años otorga la organización del evento a personas que han contribuido con su trayectoria al engrandecimiento de la música o la danza. Tras unas palabras de Ana Carmen Ortega, hicieron entrega del galardón el director del Festival, Diego Martínez, y la alcaldesa de Úbeda, Antonia Olivares.

Miguel Ángel Gómez-Martínez, natural de Granada, estudió piano, violín y composición en su ciudad, Madrid y Estados Unidos, así como dirección de orquesta en Viena. Ha sido invitado por los teatros de ópera más famosos del mundo, dirigiendo en los festivales de Berlín, Viena, Múnich, Salzburgo, Granada o Santander y las más prestigiosas orquestas (Filarmónica de Viena, Gewandhaus de Leipzig, Staatskapelle de Dresde, Sinfónica de Viena, Royal Philarmonic y Filarmónica de Londres). De 1984 a 1987 fue director titular de la Orquesta Sinfónica de RTVE y también fue director artístico del Teatro de la Zarzuela de Madrid. Desde 2004 es director musical de la Orquesta del Festival de Pascua de Bayreuth y en 2017 asumió, de nuevo, la titularidad de la Orquesta de RTVE.

Filarmónica de Málaga

Aún con la desazón por la suspensión del concierto de la Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE, los melómanos ubetenses y aquellos desplazados desde otros puntos del país para disfrutar del Festival Internacional de Música y Danza 'Ciudad de Úbeda' pudieron quitarse en la noche del sábado el mal sabor de boca gracias al magnífico concierto que ofreció la Orquesta Filarmónica de Málaga. Un recital que tuvo lugar en el auditorio del Hospital de Santiago.

Se trató de un monográfico del compositor hamburgués Johannes Brahms, integrado por la cuarta de sus sinfonías y el Concierto número 1 para piano y orquesta, en el que estuvo como solista al piano Javier Perianes, buen amigo del festival ubetense pues en ediciones anteriores fue protagonista de veladas memorables.

Respecto a la sinfonía, es la culminación del ciclo sinfónico de Brahms, obra maestra donde las haya, cuya peculiaridad más notable es el cuarto de sus movimientos: una extensa passacaglia con treinta variaciones y una coda resolutiva. Y el concierto para piano es una gran obra de juventud, llena de vida, empuje y color, que requiere del solista una formidable técnica. Aquí Perianes estuvo magistral.

Otro reconocimiento

En el descanso del concierto, el director titular de la orquesta, Manuel Hernández Silva, recibió el Premio Nacional 'Amigos de la Música' que todos los años otorga la organización del evento a personas que han contribuido con su trayectoria al engrandecimiento de la música o la danza.

Nacido en Caracas (Venezuela), en 1962, Hernández Silva se formó en Viena, donde en el año de su diplomatura ganó el concurso de dirección Forum Jünger Künstler convocado por la Orquesta de Cámara de Viena, a la que dirigió en la Konzerthaus de la capital austríaca. Ha actuado como director invitado con prestigiosas orquestas internacionales, dirigiendo además las mejores formaciones españolas.

Thomas Quasthoff y el jazz

El cierre de esta tercera semana de Festival fue sublime. Tras pasar por ciudades como Hannover y Berlín y hacer parada el viernes en Madrid, donde revolucionó el Auditorio Nacional, el prestigioso bajo-barítono alemán Thomas Quasthoff se perdió el domingo por los cerros de Úbeda para mostrar su cara más jazzística, con la que no deja de sorprender a propios y extraños, los primeros por estar acostumbrados a escucharle en otros registros y los segundos por quedar maravillados al instante con esa prodigiosa voz, profunda y poderosa.

En el marco del trigésimo Festival Internacional de Música y Danza 'Ciudad de Úbeda' ofreció uno de los dos únicos recitales programados en España antes de seguir recorriendo otros puntos del planeta, haciendo escala en ciudades como Frankfurt o Hamburgo. Dejando a un lado su especialidad en el campo del Lied alemán, oratorio y música sinfónica con intervención de solistas líricos, llegó para presentar su nuevo álbum de jazz, 'Nice 'n' Easy', su tercera aproximación discográfica al género junto a 'Watch what happens' y 'Tell it like it is'.

El espectáculo, presentado bajo el título 'My favourite things', como aquel legendario disco de John Coltrane aunque en alusión al clásico de Hammerstein & Rodgers para 'Sonrisas y lágrimas', logró abarrotar el auditorio del Hospital de Santiago de un público expectante al que le aguardaba un recorrido por la historia de la música popular norteamericana, con mucho de jazz pero también con un poquito de blues.

Echó mano de autores como Billy Preston, Bob Sherman, George Gershwin, Duke Ellington e incluso John Lennon y Ray Charles. Una selección de nombres propios de auténtico lujo que sonó a gloria en versión de Thomas Quasthoff que, aun teniéndolo artísticamente todo, necesita más. Sólo así se entiende que se entregue al sortilegio del jazz y el blues. Su voz estuvo arropada por el piano de Frank Chastenier, el contrabajo de Dieter Ilg y la batería de Wolfgang Haffner, auténticos maestros en lo suyo.

Trío en El Salvador

Previamente a todo ello, el jueves, abriendo esta tercera semana y teniendo como marco la Sacra Capilla de El Salvador, se pudo disfrutar de una magnífica velada que propuso el trío formado por Juan Pérez Floristán (piano), Pablo Barragán (clarinete) y Andrei Ionita (violonchelo). En sus atriles colocaron obras de Johann Sebastian Bach y Johannes Brahms.





No hay comentarios:

Publicar un comentario